La fuerza de las palabras frente a la fuerza de las manos es el título
de uno de los apartados del tema pensamiento, lenguaje y comunicación
que imparto desde hace muchos años en la asignatura de Fundamentos de
Comportamiento Humano en el grado de Trabajo Social de la Universidad
de Murcia. Siempre he tenido la plena convicción de la importancia del
diálogo y de buscar puntos de encuentro como marco de referencia y
pilares básicos de cualquier convivencia democrática. Por eso no
entiendo el nuevo marco de convivencia que se está generando basado en
la crispación, polarización y el diálogo de sordos. Estoy pensando que
cada vez estoy más desconectado de la realidad en la que vivimos y que
planteamientos docentes como el que yo defiendo en clase están ya
obsoletos. ¿MI TIEMPO HA PASADO?
Me dicen que mi tiempo no ha
pasado: “Al contrario. Ahora haces más falta que nunca” (Manoli Canovas).
“Ahora es cuando es más necesaria que nunca tu enseñanza, la
transmisión de valores, la tolerancia y aceptación de la diversidad
basados en el respeto y entendiendo claramente la paradoja de la
tolerancia de Karl Popper” (Emmanuelle Gutiérrez y Restrepo). "El
encuentro y el diálogo no son de otro tiempo... Requiere reflexión y un
sistema de valores que los acompañen” (Antonio Ripoll Spiteri)
No sé
qué responder. Creo que ahora estamos ante nuevas reglas de juego y
nuevos valores; hay que preparar a los futuros profesionales para ese
nuevo escenario en el que van a vivir y trabajar.