Un sueño en la mochila (XXIX)

Capítulo 29: Bocas del Toro, un mosaico de islas y aventuras

Llegaba la última etapa del viaje. Bocas del Toro los recibió con un abrazo de islas exuberantes y aguas turquesas, un paraíso que parecía pintado con los colores de sus propios sueños. Sofía y Dani exploraron el archipiélago en barco, cada isla un mundo nuevo y sorprendente: playas escondidas donde la arena blanca se fundía con el mar, manglares misteriosos que guardaban secretos en sus raíces entrelazadas, y arrecifes de coral, un caleidoscopio de vida bajo las olas. Nadaron con delfines, sus cuerpos plateados cortando el agua como cuchillos de luz, y practicaron snorkel entre peces tropicales, maravillados ante la explosión de colores que los rodeaba. En Isla Bastimentos, se adentraron en la selva, siguiendo senderos que los llevaron a cascadas que caían como lágrimas de cristal y miradores con vistas panorámicas que les robaban el aliento.

 

El aire estaba impregnado del aroma a flores tropicales y a la brisa marina. El sonido de las olas rompiendo contra el casco del barco era una suave melodía de fondo. "¡Qué lugar tan increíble, Dani!", exclamó Sofía, sus ojos brillando con la misma intensidad que el sol sobre el agua. "Nunca había visto tantos animales en libertad. Es como si la naturaleza misma estuviera celebrando nuestro amor."

 

Dani asintió, maravillado por la biodiversidad del archipiélago. "Bocas del Toro es un paraíso para los amantes de la naturaleza, mi amor. Cada isla es un mundo por descubrir, como nuestro amor, que cada día se hace más profundo y sorprendente."

 

Sofía se acercó, sus ojos brillando con la misma intensidad que el sol sobre el agua. Sus labios se encontraron con los de Dani, un beso lento y profundo que sabía a sal marina y promesas. Mientras Dani la abrazaba, Sofía cerró los ojos, sintiendo una oleada de gratitud. Este viaje, este hombre... era más de lo que jamás había soñado.

 

Pero incluso el paraíso tiene su fin. Dani y Sofía decidieron dejar en este lugar, la última etapa de su alucinante viaje, la novela "El sueño de una vida" de Shirin Klaus, para que otros viajeros la encontraran y pudieran llevarla en su mochila. Concretamente, la dejaron en un alojamiento llamado Skullys, que está localizado en primera línea de playa, con mucho espacio exterior para compartir el tiempo libre: billar, distintos restaurantes, alquiler de motos y bicis, y un bar. La novela llevaba una nota que invitaba a quien la encontrara a sumergirse en sus páginas y compartir la magia que ellos habían vivido. A más de 8.000 kilómetros de distancia, la novela iniciaría un nuevo viaje, llevando consigo el eco del amor de Sofía y Dani y la promesa de nuevos sueños por cumplir.

 

Mientras observaban la puesta de sol, una bandada de pájaros voló hacia el horizonte, como si guiaran a Sofía y Dani hacia su propio destino. "¿Te imaginas que alguien encuentre el libro y descubra su poder mágico?", preguntó Sofía con una sonrisa soñadora.

 

Dani la miró con ternura y entrelazó sus dedos con los de ella. "Seguro", respondió con una sonrisa enigmática. Seguro que pronto conoceremos a quien lo ha encontrado y le ha dado una nueva vida a las páginas del libro."

 

Continuará... Capítulo 30: Epílogo final, un sueño compartido que continúa