viernes, 7 de mayo de 2010

Nuestro “Gorgotón”: Un manantial de agua templada

Durante muchos años mi primer baño, en los primeros días de mayo, ha sido en el "Gorgotón", manantial histórico descrito por los romanos como “La fuente negra”. La temperatura del agua y la especial situación geográfica lo hacen excepcional; una bañera natural con aspecto de piscina diminuta, y suelo de guijarros redondeados y bullentes (Ver imágenes actuales del "Gorgotón"). A la salida de Almadenes, doscientos metros aguas abajo de la central eléctrica, en la margen izquierda, aparece una surgencia kárstica y geomorfológica: la Fuente del Gorgotón (o Borbotón). Las aguas de escorrentía superficiales se infiltran en el Sinclinal de Calasparra, acumulándose superficialmente y aflorando a través de una fractura dando lugar al Borbotón, un manantial de agua templada único en la Región de Murcia. Hacía ya algunos años que había desaparecido por efectos de la sequía y la sobreexplotación de las aguas subterráneas, ahora como un espejismo vuelve a surgir como siempre. Un rincón maravilloso que se pierde en la noche de los tiempos tal y como se puede ver en el texto del siglo XII que me ha pasado nuestro buen vecino Joaquín Salmeron Juan:

Sigue el río su curso y recibe a continuación las aguas del río de Calasparra. Entra después en una angosta garganta, conocida como "el estrecho de la Fuente Negra". La garganta y la fuente son una de las maravillas del mundo. Creó Dios aquel desfiladero partiendo en dos una montaña de mármol rojo. La hendidura está constituida, a derecha e izquierda, por dos paredes, cada una de las cuales tiene cincuenta brazas de altura. Su longitud es de cuatro para­sangas. Su parte más ancha mide una marya`, y su parte más angosta, un cuarto de marya`. Allí no penetra el sol sino cuando está en el signo de Géminis [es decir: cuando el día es más largo].
Por dicha garganta pasa la madera que desciende por este río hasta la ciudad de Murcia y más abajo. Al final de la garganta, está la Fuente Negra. Se trata de una fuente que brota en medio de la corriente del río, enviando su agua por el aire a la altura de una braza aproximadamente. El agua de esta fuente mana del mismo lecho del río, y es un agua negra, sulfurosa, amarga al paladar. Se dice que este agua proviene de la fuente que taponaron los cristianos de Madinat Iyya (Minateda). Dicha ciudad fue una de aquellas sobre las que pactó Teodomiro, rey de los cristianos, con Musà ben Nusayr, cuando éste conquistó al-Andalus. La mencionada fuente se encontraba en esa ciudad y regaba toda aquella vega. La taponaron los cristianos y brotó por este sitio. Entre ambos lugares hay unas doce parasangas.
Desde la fuente, se suceden sin interrupción los lugares habitados a una y otra margen del río, a lo largo de 30 parasangas, hasta Murcia.”


Libro "Kitab Al-Dja rafia” (hacia 1154 después de Cristo)
Ibn Abd Allah Muhammad d. Bark al-Zuhrî
Traducción del Dr. D. Alfonso Carmona González

¡¡Rincones especiales y únicos!!

3 comentarios:

Joaquín Salmerón Juan dijo...

Geniales las fotos. hechas con mucho cariño en momentos difíciles. Un fuert abrazo,

Joaquín

FerranVilBer dijo...

Interesantísima la referencia... parece mentira la de siglos que lleva manando el agua...Me sorprende la cantidad de escritos árabes que tuvieron que existir sobre nuestra tierra y lo poco que sabemos de ellos.

Conrado Navalón dijo...

...Tantos siglos ahí, y puede que seamos nosotros los que veamos su final...