Por un horizonte de esperanza para el Pueblo Saharaui

Esta tarde se ha clausurado la XXXIV Conferencia Europea de la Coordinación de Apoyo al Pueblo Saharaui (EUCOCO) en la que he participado como universitario y como cienzano junto al Delegado Saharaui para la región de Murcia, Saad El Mami. En esta conferencia me he sentido enormemente orgulloso de tener la certeza de que Cieza, mi ciudad, figura entre los pueblos más sensibilizados y comprometidos con la causa del pueblo saharaui. Me siento especialmente gratificado cada vez que entro en Cieza por la entrada “centro” y veo el cartel Cieza acoge niñ@s saharuais que ha sido diseñado por un Ciezano defensor incansable de la causa saharaui.
Este año la conferencia se ha celebrado en Valencia y en ella han participado mas de 400 representares de todas las comunidades autónomas y de 25 países de los cinco continentes junto a las altas autoridades del Gobierno Saharaui y representantes del Frente Polisario.
Los trabajos se iniciaron el pasado viernes por la tarde con la exposición de la situación actual del Pueblo Saharaui que se prolonga ya 33 años y la adhesión de los distintos países y colectivos nacionales e internacionales. El sábado se ha trabajado en talles sobre temas concretos como acción política, la ayuda humanitaria, los derechos humanos en los territorios ocupados, juventud, educación, mujer, cultura, etc. Y el domingo se han presentado las conclusiones de los talleres y los retos para el próximo año manifestándose de nuevo el claro apoyo internacional.
Entre los retos prioritarios destacan, en primer lugar, la defensa a ultranza del derecho irrenunciable del Pueblo Saharaui a la autodeterminación e independencia. En segundo lugar, intensificar la presión internacional a todos los niveles y en todos los foros para lograr que Marruecos cumpla los acuerdos internacionales. Tercero, fortalecer la ayuda humanitaria especialmente en este contexto de crisis internacional. Cuarto, la denuncia de la continua violación de los derechos humanos por parte del gobierno de Marruecos. Quinta, mantener la movilización y solidaridad internacional, este conflicto no puede entrar en el olvido. Y, sexto, trabajar por ofrecer a toda la población saharaui tanto de los territorios ocupados y liberados como de los campamentos condiciones de vida dignas y un horizonte de esperanza.