¿Quién y cómo se gestiona el uso de bienes de uso común como pueden ser los bosques, el agua y la pesca? Este es el núcleo central de su conferencia organizada por el Foro por el Pensamiento y el Dialogo.
Los bienes de uso común, aquellos a los que tienen acceso todos los miembros de una comunidad y que se gastan y deterioran con el uso, presentan graves problemas de congestión, sobreexplotación y destrucción.
Los ejemplos más claros los encontramos en la naturaleza: los bosques, el agua, la pesca…Las soluciones tradicionales a estos problemas han sido dos. Una propone la privatización del bien común: el dueño se encargará de hacer un uso eficiente del mismo pero solo él tendrá acceso y decidirá quién lo usa. La otra solución es el control público: el Estado regula su uso y explotación.
Numerosos casos de estudio muestran que estas dos opciones no son satisfactorias, siguen sin evitar el mal uso de estos bienes y su sobreexplotación y generan, además, problemas de equidad en relación al acceso a los mismos y a los beneficios que generan.
Las dos soluciones suponen una concentración de poder e ignoran la capacidad y el derecho de los ciudadanos a participar en la toma de decisiones relativa a su gestión. La alternativa es la acción colectiva, la gestión comunitaria. Esta opción se ha demostrado posible y deseable. Una de las condiciones necesarias para que tenga lugar la acción colectiva es la cesión de poder por parte de aquellos que controlan la gestión de los bienes comunes y esa es una de las grandes dificultades que impide que se lleve a cabo una efectiva participación ciudadana a la hora de usarlos de manera responsable y sostenible.
No hay comentarios:
Publicar un comentario