En la Galería Salzillo de Cieza, Posada de artistas, se ha hospedado durante unas semanas Paulina Real y sus Reminiscencias. Después de un largo viaje de casi 10 años dedicados a la investigación y producción artística, a exposiciones individuales y colectivas, a explorar caminos y recorrer ciudades llegaba el 27 de marzo a la Posada Paulina Real y sus 32 Reminiscencias. La semana pasada dejo la Posada entre la melancolía y la tristeza pero también con ideas más claras, más madura, con más ganas de explorar nuevos lenguajes expresivos, más convencida de la necesidad de profundizar en la investigación como parte esencial del proceso creativo. En la imagen que acompaña esta entrada la podemos ver descolgando una de sus Reminiscencias, la número 29, titulada Reflexiones I. Y también podemos ver más fotografías junto a sus otras obras expuestas en el momento de dejar la Posada. Descuelga sus cuadros y deja la Posada, pero, Paulina, no mira hacia atrás; todo lo aprendido lo lleva en la mochila para el camino; Paulina mira hacia delante, hacia caminos nuevos; un futuro prometedor que a los ciezanos nos va a permitir sentirnos orgullosos de nuestros artístas, de nuestros vecinos.
Para comprender un poco mejor a Paulina y sus Reminiscencias algunas sugerencias: la entrevista EnCiezaDigital o su Web con acceso a su blog y las palabras de Antonio F. Muñoz como introducción a su exposición:
La actividad reflexiva y el trasiego de formas, colores, materiales y texturas que necesariamente se derivan del proceso creativo van dejando un poso creativo en la mente del artista, un almacén de material recuperable que se incorpora de un modo intuitivo e inmediato al momento creativo, donde se mezcla con una serie de ingredientes que el artista elige, acompañadas tal vez por la decisión de emprender nuevas aventuras en el terreno de la técnica o por el chivatazo ocasional de la esquiva inspiración.Todo ese material sensible ha pasado por la criba del más implacable censor: la mirada intima de auto-crítica, que es responsable si es valiente
Es muy difícil abstraerse de esta incorporación involuntaria, y de todo punto desaconsejable, sería como partir desde cero. Mucho mejor parece para el artista identificar y reconocer como propios esos flashback que emergen en cada secuencia de creación de una obra, para luego convertirlos en otra cosa o no. Al fin y al cabo, aunque todos somos un compendio de nuestro pasado, también somos presente, del que forman parte las reminiscencias de aquel.
Antonio F. Muñoz
"Chapo" por la Posada, Galería Salzillo, y por los posaderos María José Jimenez Molina y José Semitiel Segura; y un fuerte abrazo para su hija con el más profundo deseo de una buena recuperación.
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